Vuelvo para vivir de illapu: el himno post dictadura de chile

Muchas veces la inspiración para las canciones viene de un instante, de un momento, de una fotografía que permanece en la mente del compositor y que queda representada en unos versos con melodía.

Sin embargo, son contadas las ocasiones en que aquella fotografía musical logra captar un momento histórico y se arraiga popularmente, llegando a ser considerada un himno generacional. La canción Vuelvo para vivir de Illapu, que cumple 30 años desde su publicación en 1991, representa uno de estos casos.

Antes de comenzar, es importante destacar que parte de esta investigación, con las entrevistas plasmadas en este artículo, provienen de una investigación inédita que se realizó en 2018, y que forma parte del proyecto de título Cuando el juego se hizo verdadero, de los periodistas Rodrigo Tapia y Carlos Tuñón, que reúne la historia e impacto cultural de cinco canciones chilenas fundamentales para comprender la década de los 90 de Chile.

Vuelvo amor… Vuelvo vida (Illapu) [1992]
Portada de Vuelvo Amor, Vuelvo Vida (EMI, 1991), el primer álbum de estudio de Illapu tras volver del exilio a su país.

Antes de volver

El folclore y la Nueva Canción Chilena no fueron los géneros musicales preferidos de la dictadura. En aquella época resultó común que artistas como Charo Cofré, Fernando Ubiergo, Joan Manuel Serrat e incluso Domenico Modugno estuviesen prohibidos en los medios de comunicación nacionales por tratar temáticas políticas en sus canciones o discursos.

Una situación similar vivió la agrupación Illapu en 1981, cuando tras presentarse en París, deciden regresar a Chile para actuar en el programa Chilenazo, conducido por Alfredo Lamadrid. Antes de bajarse del avión, la agrupación fue avisada por autoridades del régimen, que debían devolverse al continente europeo, ya que estaban acusados de realizar “actividades marxistas y de desprestigio del país en el extranjero”. Desde ese momento, quedaron en la lista de músicos prohibidos por la dictadura. 

Este hecho propició que la agrupación liderada por los hermanos Andrés y Roberto Márquez, siguieran su carrera en el extranjero, con giras y publicación de material inédito.

La esperanza por volver a sus raíces siempre estuvo presente. “Se interrumpió un desarrollo natural que íbamos llevando con la gente y que costaría mucho recuperar” recuerda Roberto.

El 2 de septiembre de 1988, el diario El País de España publicó una nota que titulaba “Pinochet anuncia el fin del exilio chileno”, tras la decisión del Ministro del Interior de ese entonces y que en 1990 asumió como Senador designado hasta 1998, Sergio Fernández Fernández, tras decretar sin efecto el artículo en el que prohibía el ingreso de las personas exiliadas. 

Desde la difusión de la noticia, pasaron 15 días hasta que Illapu descendió del avión que los trajo de regreso a su país.

Parque La Bandera

Si hubiese que representar con un acto artístico la campaña del NO, previo al plebiscito en Chile, ese sería el multitudinario concierto realizado por algunos artistas en el Parque La Bandera, el 24 de septiembre de 1988.

Aquella ocasión marcó un hito para la música chilena, ya que fue la primera vez que Illapu pudo volver a tocar en el país tras su exilio de 8 años.

Roberto Márquez no esconde la emoción al referirse al momento de su regreso a Chile, señalando que “nosotros no esperábamos un recibimiento como el que la gente nos dio cuando llegamos a Pudahuel. Te hacía sentir como una personalidad que llega a un país y lo recibe todo un pueblo, que tú vas por la calle y la gente en la orilla te va haciendo señas. Ni en el mejor de los sueños podrías siquiera imaginarlo”.

Al encuentro asistieron más de 100 mil personas y su presentación fue registrada para ser lanzada como álbum en vivo al año siguiente, bajo el nombre En vivo: Parque La Bandera (EMI, 1989).

Ese evento marcó un antes y un después en la banda que vivió durante la década de los 90 su mayor éxito comercial. El himno llamado Vuelvo para vivir nació tras esta gran experiencia.

Vuelvo para vivir 

Según Andrés Márquez, el compositor de la canción, uno de los grandes errores en los que incurre la gente al hablar sobre Vuelvo para vivir es que se compuso en el periodo que se levantó el decreto que les permitió regresar a Chile.

Sin embargo, tal como el músico confiesa, la principal fuente de inspiración a la hora de escribir la canción fue después del concierto del Parque de la Bandera, cuando viajó hasta su casa en Ciudad de México.

Allá, sentado al borde de su cama con una guitarra acústica y un cuaderno, el compositor recién comenzó a asimilar la gran experiencia sensorial que vivió a su regreso en su país: Las personas esperándolos en el aeropuerto, los pañuelos con los que la gente los saludaba mientras iban camino al aeropuerto de Pudahuel, y las más de 100 mil personas que convocaron en el parque.

Al volver a Chile tú te das cuenta de cómo son las cosas, del significado de estar allá y acá, de lo que dejaste de ver, dejaste de hacer, dejaste de tener cuando te fuiste, y que tal vez no lo añoraste, pero que vivía contigo”, dice Andrés Márquez.

Además, el compositor relata que “Vuelvo para vivir fue el retrato de nuestro país a través de cosas que tenías dentro, que ibas a volver acá, ibas a volver a encontrar a tu gente, ibas a volver a encontrar tu forma de vida, cosa que en muchos aspectos tampoco fue así”.

A pesar de eso, Márquez asegura que la canción no está basada únicamente en esa vivencia específica, ya que en ese momento de inspiración también hubo otros pensamientos: 

“Está llena de amor, de frases que la gente me dijo en alguna conversación, cuando tomábamos una cerveza en la noche. Todas esas cuestiones a ti te quedan, y cuando te sientas a hacer una canción se te pasan por la cabeza”.

En cuanto al proceso de creación, el autor señala que fue bastante expedito, sentándose a escribir a las 11 de la noche y a las 3 de la mañana ya estaba agregándole la música.

Andrés asegura que con Illapu nunca conversaron sobre hacer una canción de retorno, sino que se dio naturalmente. Asimismo, explica que tampoco pensó que se convertiría en éxito y menos que se transformara en un himno trascendental para la sociedad chilena.

Vuelvo para vivir tiene la fuerza de ser una canción que representa la unión entre la gente, los que vienen de afuera y los que están acá, porque en el fondo, los que están acá también están volviendo, están volviendo a ser libres, están volviendo a salir a la calle, a gritar, a decir lo que piensa”, describe Márquez.

En estos días

Tuvieron que pasar 2 años para que el regreso de Illapu se viese reflejado en un álbum de estudio. Vuelvo amor… Vuelvo vida (EMI, 1991) contiene 10 canciones, entre las que destacan Baila Caporal, Mande Mandela y Se alumbra la vida. Todas cuentan con un fuerte contenido político y social da cuenta del sentimiento del grupo a su vuelta a Chile.

Según recuerdan desde EMI –su discográfica de ese entonces–, durante la década de los 90 los artistas chilenos que vendieron más copias de discos fueron Myriam Hernández, Los Prisioneros e Illapu, produciéndose una distancia significativa con el resto de los artistas fichados por la compañía y los sellos de la competencia.

Roberto Márquez recuerda el éxito de Vuelvo para vivir y explica que fue impulsado gracias a la promoción de su siguiente álbum, En estos días (EMI, 1993) que se convirtió en el disco más vendido de la década, con más de 140 mil copias vendidas en el país, solo superado en 2003 por México Lindo y Querido de María José Quintanilla que superó las 150 mil copias.

“Cuando sale ese disco recién la gente descubre que hay una placa anterior que se llama Vuelvo amor… Vuelvo vida, y ahí recién conocen Vuelvo para vivir. Para nosotros era un tema super importante que había reflejado nuestro retorno, pero que en un comienzo solo era conocida por un público más militante del grupo”.

En 1992, el álbum Vuelvo amor…Vuelvo vida fue certificado con Disco de Oro y la APES los premió como “Grupo más popular del año”. En esa línea, Illapu se presentó en innumerables espacios de televisión de Chile y en el extranjero, y sus singles contaron con importante difusión radial.

Sin embargo, Andrés Márquez al ser consultado por su experiencia más particular bajo el contexto de estas instancias, recuerda una ocasión en que el grupo interpretó Vuelvo para vivir en Sábado Gigante, en Miami.

“Cuando tocamos la canción, los cubanos que estaban en el público lloraban. Ellos son de derecha, nosotros de izquierda, pero el fenómeno de la letra provocó el mismo sentimiento en gente que vivió lo mismo. Ellos también estaban lejos de su país, exiliados”, confiesa Márquez, y asegura: “Esta es una canción que va más allá de los chilenos, es una canción humana”.

Escucha el álbum Vuelvo amor…Vuelvo vida a través de Spotify:

* Publicado por Carlos Tuñón *